LA TROMPETISTA DE FALOPIO: MISCELÁNEA ANÍMICA



MISCELÁNEA ANÍMICA

Hay días que uno está entelerido, de modo que se guarda en casa, para no dar trastumbos ni causar pena al prójimo. Otras veces uno se encanija y echa haches y chés, hasta que le arde la lengua. También hay temporadas en que uno se siente colmado de contentura, engalanado. Yo no sé qué fue primero, si la rabieta, la risa o el llanto. Me dirá usted que la vida es una mezcla de estados de ánimo, que en ella el orden cronológico es irrelevante. No estoy de acuerdo. La secuencia determina la perspectiva. Uno puede creer que no importa cuánto merezca la dicha, ni cuánto haga por conservarla, pues al final lo maravilloso conquistado o recibido se va al carajo, y en su lugar sobreviene el dolor; entonces domina la idea de que la vida no es más que una constante amputación. Pero también se puede invertir el orden, creer que a los días adversos siguen los de abundancia.
Elijo la ruptura de algunos lazos, costumbres y viejas maneras. Hoy todo es proyecto . Amanecí con la risa y con los ojos nuevos.
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8 Comments:

At 9:11 a.m., Anonymous Anónimo said...

Pero tal vez no se elige la secuencia, sólo está ahí.

 
At 8:12 p.m., Blogger B. Rimbaud said...

Ánimo, si se puede si funciona, solo por hoy jajaja

 
At 10:21 p.m., Blogger Black Bird said...

chale, que triste se nos fue la vida... jaja, no en serio me gusto mucho la ultima frase:
Hoy todo es proyecto. Amanecí con la risa y con los ojos nuevos.

además últimamente me siento así estos días: a veces da la impresión que todo está a la expectativa, pues como dice una amiga: todo está en el timing...

 
At 12:14 a.m., Blogger Francisco Palacios said...

Ps el tal Schopenhauer dice en la Eudemonología que una de los consejos para ser feliz es no pensar que vendrán mejores tiempos, de esta forma evitaremos el dolor al no encontrarlos.
Saludos

(desconozco la validez de mi argumento, sólo espero con ansiedad su contestación)

 
At 2:01 a.m., Blogger Lidia said...

leyendo nuevamente, ya me había desacostumbrado.
Sabe qué es lo malo de esta miscelanea, que no se puede escoger lo que se quiere sentir, aunque sí lo que al final nos queremos llevar.

Saludos bruja

 
At 11:37 a.m., Anonymous Anónimo said...

Es lastimoso que mi oscuridad la confunda: la cabellera que surge de este cuero cabezudo es bruna…

Suponía que su entrenamiento profesional la había armado de toda suerte de lámparas metodológicas para iluminar los recovecos ideológicos más recónditos (¡cómo me gustan las esdrújulas!)... (Tanta alharaca para decir que quizás tengas razón, que probablemente no haya sido lo suficientemente claro. Pero me esforzaré).

la vida no es más que una constante amputación

Entre las múltiples hebras que su bordado muestra, yo elegí ésta para deshilar. ¿La vida una amputación constante y progresiva? ¿Conforme entramos en años, entonces, nos volvemos más biónicos, una especie de Robocops o Darth Vaders sentimentales? Porque aunque se hable por ahí de desalmados, no creo que tales seres existan (he ahí la desgracia)... O quizás nuestras almas sean como las colas de las lagartijas, hechas para regenerarse, frágiles por diseño para que nos permitan escapar. Tal vez... Hay estudios (estos no húngaros, sino holandeses) que indican que la velocidad de regeneración (de las colas, no de las almas) disminuye mientras la longitud de ellas aumenta; tiene sentido, ¿no?

Un abrazo.

PD Cada vez escribe mejor su merced. Esto no es críptico, ¿o sí?

 
At 3:17 a.m., Blogger Allegro said...

claro que, siempre puedes esperar encontrar el hilo que entrama la vida a la realidad, tomar púa de ubicuidad y trenzar cada acontecimiento en un orden privilegiado, áureo. Hoy es uno de esos días...

 
At 11:43 p.m., Blogger Livi Jazmín said...

ANÓNIMO: lo mismo que usted, tampoco creo que la secuencia sea voluntaria.
BERNARDO: ?
BLACKBIRD: buena impresión ésa, ¿no le parece? Saludos.
FRANCISCO: creo que el argumento es coherente si piensas que la felicidad es la ausencia de dolor. De cualquier manera, yo no confío en los filósofos en cuanto al tema de la felicidad. Responderé de modo intuitivo. La vida es así, con su dosis de dolor y con su dosis de placer, hay que aprender a medirlas para no hacer ¡boooom! Ahora, si se trata de evitar dolor, entonces podríamos meternos bajo la cama, o renunciar a cosas placenteras ¿y para qué?
LIDIA: sí, es lo que dice el anónimo y yo estoy de acuerdo: uno no elige que sentir. Saludos.
CUERO CABEZUDO: es que su merced aveces habla de modo harto metafórico. Estuve a punto de escribir en el post la analogía de la cola de lagartija, pero no lo hice porque me pareció un exceso de imágenes. De cualquier manera creo que no todo miembro se regenera, aunque estos días donde corto rabo crece un ala.
ALLEGRO: no entendí lo de "púa de ubicuidad," pero me gustó su seudónimo.

 

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