LA TROMPETISTA DE FALOPIO: EL PATIO DE MI CASA



EL PATIO DE MI CASA

Hace poco mi mamá y yo visitamos el departamento en el que vivimos durante dieciséis años. Ahí siguen varios vecinos y Manchas, gorda y arisca porque ahora es una perra vieja. El departamento se venderá este año, quizá por eso sentí nostalgia cuando vi, desde la ventana de mi antiguo cuarto, el patio. Cuánto jugamos ahí, en las escaleras, en el pasto y sobre la cisterna. No puedo contarlo todo, pero contaré algunas cosas y dispénseme si repito una que dije en otra ocasión; lo que pasa es que este recuento no es sólo para ustedes, sino que está dedicado a Enedelia, mi mejor amiga de la infancia, con quien perdí contacto cuando se fue al gabacho, y a quien después de muchos años acabo de reencontrar en la red.
Éramos un montón de niños. Éramos aún más cuando venían los del otro patio. Jugamos escondidillas, avión, resorte, encantados, coleadas; jugamos con Barbies, muñecos de carriola, trompos Duncan y una alberca inflable; jugamos Uno, Destreza, videojuegos y Escrúpulos; jugamos carreras de pies, bicicletas, avalanchas, patines; jugamos con el horno mágico de Paulina, con mi máquina de raspados y mi caja registradora; jugamos a tocar timbres y correr; jugamos con casillas imaginarias a La Oca de la tele; jugamos a ser cantantes, mamás, maestras, patinadoras; jugamos a decir cosas bien chistosas que grabamos en cassettes; jugamos stop y seis seis seis 666, corona, cerveza, media vuelta… Ingerimos cantidades poco saludables de chicles bola y brinquitos, intentamos fallidamente vender a los transeúntes vasos con zanahoria rallada, espiamos a los guapos del otro patio, celebramos cumpleaños, jalogüins, día de reyes magos, y aunque peléabamos cada rato, olvidábamos pronto y seguíamos jugando, hasta que un día dejamos de jugar.
Por la distancia geográfica, no sé si volveré a ver en persona a Ene, pero estoy segura de que seguiré riendo al recordar la infancia que pasamos juntas y que de vez en cuando todavía extraño.

Etiquetas: , , , ,

« Home | Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »

2 Comments:

At 10:35 p.m., Blogger Esponjita said...

más o menos así suena también mi infancia, sólo que no alcanzamos el juego de la oca, y que la etiqueta debió decir "ochentas"...

besotes

 
At 10:08 a.m., Blogger Livi Jazmín said...

Pues no hay nada como una infancia feliz, ¿a poco no? Le mando un abrazo y ojalá que un día destos se deje ver... No acudió a la reunión de blogueras de El Montonal :(

 

Publicar un comentario