SEÑORA SOBERANA CON (DELANTAL Y ) KATANA.
Cuando se estrenó Kill Bill, todos los de esgrima nos volvimos locos de felicidad. He visto la película una docena de veces. Me emocionaba hasta las lágrimas ver a Beatrix Kiddo librarse de esa arma esférica y afilada que manejaba Gogo, luego pelear contra los 88 locos al ritmo de Nobody but me, ah, y qué emoción verla aprender bajo la casi inhumana tutela de Pai Mei, verla romper su ataúd con el puño, salir de la tumba, buscar a Elle Driver, sacarle "su único y hermoso ojo azul" en nombre de Pai Mei. Y qué decir del momento en el que Hattori Hanzo le entrega la mejor espada y qué decir del gran duelo con O – Ren – Ishi. Durante años Beatrix Kiddo fue para mí, aspiración y arquetipo de guerrera.
De cualquier modo, The Bride ya no es mi guerrera favorita. Es cierto que es la señora soberana del kung - fu y la katana; sin embargo, su lucha no es más que la venganza por la interrupción de su proyecto con delantal, ella quería ser madre y quedarse cantando como un grillito junto a la chimenea. Y efectivamente, tras la venganza, recupera a su hija y fueron felices por siempre jamás. Fin de la lucha, nuestra guerrera ha vencido. A pesar de las ideas y el desenlace corrientes, me sigue gustando mucho la película. Y cuando escucho las rolas recuerdo una época de bailongo, libertad, piernón loco y gran fascinación por las espadas.
En fin, los invito a recordar y disfrutar la masacre en la casa de las hojas azules:
De cualquier modo, The Bride ya no es mi guerrera favorita. Es cierto que es la señora soberana del kung - fu y la katana; sin embargo, su lucha no es más que la venganza por la interrupción de su proyecto con delantal, ella quería ser madre y quedarse cantando como un grillito junto a la chimenea. Y efectivamente, tras la venganza, recupera a su hija y fueron felices por siempre jamás. Fin de la lucha, nuestra guerrera ha vencido. A pesar de las ideas y el desenlace corrientes, me sigue gustando mucho la película. Y cuando escucho las rolas recuerdo una época de bailongo, libertad, piernón loco y gran fascinación por las espadas.
En fin, los invito a recordar y disfrutar la masacre en la casa de las hojas azules:
Etiquetas: a felicidade, espadas, héores, personajes, viejos tiempos
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on miércoles, junio 17, 2009 at 1:11:00 p.m..
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8 Comments:
Yo la sigo admirando.
Creo que yo no sobreviví a la batalla de la meternidad y creo que al final, no hay pelea más grande que la de educar, transformar y crear una nueva mente con semillas rebeldes.
Dudo que Beatrix se haya dado por vencida.
Esa peli me trae muchos recuerdos.
Y sin duda me gusta muchisimo.
La venganza es dulce, sea lo que digan, siempre es dulce...
^^
Es muy feo cuando los finales dicen "y ahora, qué?" Como en The Truman Show, cuando se termina, oza, todo mundo sabia que se jugaba una vida y namás decian "bueno, ahora qué vemos?". Supongo que es más feo cuando el fin de una venganza lleva a esa pregunta.
Reinaaaa mi mail es necrobuba [at] gmail.com a tus servicios ;)
Saludos!
Como Fan de Killeh Ville diré: Pana, olvido la parte del diálogo entre Bill y Beatrix Kiddo, en donde confieza que es una asesina por naturaleza, en donde es sincera con sus aniquilamientos y acepta que disfruto cada muerte en su camino. Y bueno todo esto lo digo porque a cada venganza consumada, si es que se consuma, viene consigo una nueva venganza, desde otra mirada, desde otro deseo de aniquilacion. Pero volviendo al principio del punto puntual diré, que al final nunca sería ella esa mujer del "Vivieron felices para siempre." Sería la mujer que se niega aceptar que desearìa aniquilar sin motivos personales. Bueno eso creo.
Hola, me gustaría saber que opinión tienes, como miembro de un colectivo estudiantil de la facultad, de la campaña que el consejo universitario inició en torno al retiro de los ambulantes de filos y la recuperación del auditorio ché guevara y los demás espacios de la facultad ocupados por estudiantes o colectivos.
un saludo
s.g.
MUJER GUERRERA: si Beatrix Kiddo, pensara que no hay más grande pelea que la maternidad y la educación, no habría matado a Vernita Green (quien tenía una niña de cinco años, que accidentalmente presenció el asesinato.)Para Beatrix era más importante SU venganza que la educación o la maternidad en general. No considero que The Bride sea una rebelde, más bien era una matona a sueldo y luego una matona vengativa.
Ahora, ya en una postura personal, por supuesto que pienso que no hay batalla más grande que educar y, como dices, sembrar semillas rebeldes (y la maternidad no es la única posibilidad para hacerlo.)Un abrazo.
KOBERNEIN: estoy tratando de recordar si alguna vez me he vengado, mmm... seguramente sí, pero lo olvidé. Saludos.
OCTOPUS QUEQUE: reinaaa, ya te mandé un mail.
MI QUERIDÍSIMO Y NUNCA MAL PONDERADO COMPADRE SANTEY: por supuesto que no olvidé esa parte. De hecho, supuse que alguien la sacaría a colación.
Efectivamente, cuando Bill inyecta "el suero de la verdad" a Beatrix, ella acepta que sintió placer con cada una de las muertes que provocó en su venganza. Yo haría una diferencia, si quieres sutil: no diría que "es la mujer que se niega a aceptar que desea aniquilar sin motivos personales" sino que es la mujer "que no desea matar sin motivos personales (lo cual no excluye que sienta placer al hacerlo)." La parte que me parece más fuerte para objetar mi interpretación tiene lugar cuando (también bajo la influencia del suero de la verdad) Beatrix acepta que no hubiese podido adaptarse a una vida "normal." No sé, parece que hay una fuerte lucha interna en The bride, una lucha entre el deseo de una maternidad tranquila y el deseo de aniquilar; pero yo creería que es más fuerte lo primero.
POSTDATA PARA SANTEY: ¿te acuerdas cuando salieron las espadas Hattori Hanzo en el gabacho? Jíjoles, si fuera una ricachona excéntrica, habría pedido la mía. ¿Y se acuerda cuando escuchábamos las rolas del soundtrack en Cuerna? Ah, qué buena época.
S.G (no entendí lo primero ¿usted es miembro de un colectivo, o quiso decir que yo lo soy?):
1)Estoy en contra de la iniciativa de retiro de ambulantes. Me parece una medida injusta, pues quienes estamos en CU sabemos que la gente que vende comida, discos, películas, útiles y artesanía, no es la gente que vende droga. Además, quitar a los vendedores, fue una decisión arbitraria, al márgen de la comunidad universitaria.
2) En cuanto al auditorio Che Guevara: me parece necesario que haya espacios "de resistencia" dentro la universidad. El problema es que el auditorio ya no es un espacio de resistencia. Una vez hasta me entregaron un flyer de una fiesta que se iba a celebrar ahí dentro, porque al parecer, es un buen lugar para fumar y chupar; estoy en contra de eso.
Pienso que lo deseable sería que mediante acuerdos entre activistas se regularan las actividades que se llevan a cabo dentro del auditorio; sin intervención de las autoridades universitarias; pero no estoy tan segura de que esto sea viable.
Una estupenda forma de cortar cabezas y otras cosas. Abrazos.
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