LA TROMPETISTA DE FALOPIO: Y VAPOR DE COLORES



Y VAPOR DE COLORES

Dos rejas mediaban entre Marcos y nosotras, una dividía las unidades habitacionales, otra la primaria de la secundaria. Recuerdo que C y yo pasamos un recreo frente a los barrotes, viendo al muchacho encestar, al tiempo que echábamos suspiros y comíamos nuestro changüis. En ese entonces nos gustaba jugar, pero de vez en cuando hacíamos a un lado los juguetes, para mirar a través de la ventana, o de la malla de nuestro patio, pues del otro lado estaba él, todo trigo, pestaña y galanura; a veces con balón, otras con patineta. No aspirábamos a otra cosa, pues a esas alturas él ya andaba con novias, novias que tenían incipientes curvaturas, contra las cuales era vano competir. Una ocasión Marcos se acercó a nosotras. Quería vendernos boletos para una tardeada. ¡Ánimas del purgatorio! A causa de la emoción, en esos boletos gastamos hasta el último quinto de nuestro domingo. Creímos que Marcos pasaría la fiesta con nosotras, cándidas dos, no contábamos con que él buscaba el puro business, así que a duras penas ofreció su brazo para bajarnos del coche.
Estuvimos en fiestas donde se partía pastel y piñata, y se recibían dulces por montón; pero esto era otra cosa, la primera otraclasedefiesta a la que asistimos. Fuera de C y yo, nadie había ahí que estudiase el quinto año de primaria, sino que todos nos parecían harto mayores y descocados, pues brincaban entre vapor de colores, gritaban y sacudían la melena. En nada imitamos cuanto vimos, mas no por juiciosas, sino porque nos entró la tara; además, nadie nos sacó a bailar, de modo que pasamos la fiesta entera en una silla. Yo me enojé con Marcos, pero sobre todo con mi moño, que aquella noche fue delator, intruso y enemigo. Tenemos que cambiar, pensamos C y yo con determinación. Pero no, la verdad es que seguimos jugando con muñecas, nintendo, bicicleta, juegos de mesa, grabadora y patines; aunque no durante mucho tiempo.
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4 Comments:

At 10:42 a.m., Anonymous Anónimo said...

Parece que como a mí, has dejado sin palabras al resto de los comentaristas. Quizás éste sea uno de los mejores textos que te he leído. Por lo menos yo votaría por su inclusión en los éxitos de ayer, de hoy y de siempre (¡al diablo con el número de comentarios!). Examino la memoria y no hallo ninguna instancia en la que las flechas de Eros hayan venido hacia mí desde lo alto (en función de edad, no de estatura). Siempre mis heridas las recibí a nivel o desde abajo. Un aplauso por esos vapores coloridos y, sobre todo, por el moño delator.

 
At 11:23 a.m., Blogger Lidia said...

y Livi se convirtió en mujer...

Saludos

 
At 12:36 p.m., Blogger maus said...

la inocencia que fue devorada por las luces parpadeantes y los bailes modernos.

 
At 3:49 p.m., Blogger Livi Jazmín said...

CUERO: oh, qué padre que te gustó, yo me divertí mucho al escribirlo. Saludos con abrazo incluido.
LIDIA: sí, mucho tiempo después. Todavía a los catorce me disfracé de calabaza.
MAUS: jajajajajajajajajajaja. Los bailes modernos, me acuerdo de una rola desa fiesta: "Call him Mr Raider call him Mr Wrong
Call him Mr Vain
Call him Mr Raider call him Mr wrong"

 

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