LA TROMPETISTA DE FALOPIO: ASÍ ES SU SER



ASÍ ES SU SER

No es fácil tener una madre cuya profesión es la de educadora preescolar. Para empezar la vida y este relato, entré al jardín de niños a mis dos años de edad. Para terminar, preescolé un total de cuatro años. Con base en tal experiencia, infiero que a nadie le hace daño un período extra en la escuela; eso les dije a mis padres cuando no concluí el bachillerato en el tiempo estipulado, eso les digo ahora que curso el noveno de ocho semestres, yo les pregunto a ellos, yo les pregunto a sus mercedes: qué es preferible: calidad o cantidad. De cualquier manera, para qué abundar en detalles en torno a mi circunstancia académica, para que amargarnos la vida, volvamos al tema de las mamaes que son maestras.
Al gremio lo conozco bien. Grita, ríe y echa porras, todo ello en simultaneidad y demasía. El escándalo es también visual. Hay quien cree que el abundante ornamento de las aulas tiene fines didácticos. Yo también lo creí hasta que reparé en el baño de la dirección. Rosada la cortina, el juego de baño rosáceo el estuche de estambre que cubre los pañuelos, orlado el espejo con marco de encaje y para rematar un toallero que es muñeco, un toallero artesanal; qué lugar de rósacea y perfumosa amplitud. Ahí descubrí que a las educadoras les va en su ser el ornamento, como diría Heidegger. Sí, digas lo que digas eso diría él en caso de tener una mamae educadora; hasta donde sé, lo que tuvo fue un papá sacristán, como el mío, de donde colijo que mi destino es construir una fenomenología que nadie entienda, pero no abundemos en detalles acerca de mi futuro en la filosofía, para qué amargarnos la vida, mejor volvamos al tema.
Ahora ya no tengo miedo. Ubico las fechas y de modo inconsciente estoy preparada para ello, para abrir la puerta y a media luz distinguir cien ojos que me observan ¡hopa! Digo sin gritar, son cincuenta payasos-contenedor, o cincuenta muñecas-raqueta con trenzas, o cincuenta renos navideños de fieltro, pues según sea la festividad son los regalos, y sean cuales sean ocupan los sillones de casa durante algunos días. En fin, ya estuvo bueno de balconear otros gremios y a mi madre que es minuta y es bendita, educadora cuyo colmo es tener como hija esta mamarracho, este insulto al civismo, a la mesura y al buen vivir.
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12 Comments:

At 1:25 a.m., Blogger Gran Fornicador said...

Si Heideggger hubiera tenido una mamá educadora no hubiera construido fenomenología alguna: hubiera sido costurero o decorador de interiores, o (dios nos libre) abogado, administrador o algo así.
Saludos y abrazos, esgrimista y trompetista.

 
At 6:25 p.m., Blogger Sólo Soy Un Ojo said...

Ja ja, me recordó la escuela de mi mamá, he de suponer que todas las escuelas son asi.
Ahora bien, una cosa es que le de por escorar su escuela con cuantos kilómetros de fomi y fieltro quiera y otra es osar meter esos engendros deformes a mi casa...yo nada más espero a que se distraiga y se los tiro


ahs, ya sé, ya sé, soy mala hija y no tengo espíritu de la navidad, no tienes porque verme asi de feo.

saludos.

 
At 7:00 a.m., Blogger almena said...

:)

hoy exageras...
sobre todo en tu párrafo final.
Un abrazo!

 
At 10:17 a.m., Blogger ka! said...

Decía uno de mis primos que es "carrera no carreritas"...

..y pues..tu madre, cada madre ya ne sí pertenece a un especial gremio, el de "ellas mísmas".

...buen fin de semana!

 
At 2:24 p.m., Blogger Esponjita said...

mi querida trompetista: vaya vaya con sus memorias... de todos modos, lo que yo siempre me he preguntado es qué se sentirá ser hijo de filósofo y no morir en el intento... ¿se imagina usté la responsabilidad de traer hijos fenomenológicos al mundo?

Mis dos padres son físicos... y algún daño me ha de haber hecho saber que la leche es blanca por ser un coloide, o que al arroz hay que freirlo para que se vuelva hidrófobo y se evite su masudoficación...

Por cierto... ¿hablaba usted de la fenomenología del tal Hegelio?

la esponja hijística

 
At 11:43 a.m., Blogger Livi Jazmín said...

TIRSO: deja de devaluar al gremio de las educadoras o te saco un ojo. Saludos y ¿cuándo me das el libro que me enviaron, infame Tircho?
RÓSÁNGELA:ohohoho, tú sí me comprendes, fomi, fieltro, unicel, vinci. Pf. Cuando vaya a Mérida llevaré a mi mamá pa' que se haga amiga de la tuya.
ALMENA: exagero hoy y exagero cada día, cuando escribo y cuando no. Muchos saludos.
KAROLO: tienes razón, las mamaes conforman un gremio aparte.
ESPONJITA: pues mi papá estudió teología, de hecho su tirada era ser sacerdote, pero poco antes de ¿sacerdotarse? ¿Graduarse de padrecito? (Ash, no sé como se dice)le entró a la teología de la liberación y dijo "no dice dice abajo la iglesia, pinches curas burgueses, reaccionarios, hijos de su tal por cual" y dejó esa onda. No soy hija de filósofo, pero sí de teologo furioso. ¿Papases físicos? Ah, eso suena bien, seguro que se divirtió su merced.

 
At 11:46 a.m., Anonymous Anónimo said...

el cuero cabezudo said...

Yo tengo una debilidad especial por las practicantes de la educación, sobre todo la elemental y pre-escolar: exceso de instinto maternal bien empleado...

Cuando presenté mi examen profesional, asistió a él mi maestra de kinder (la Seño Hilda). Al apersonarse una guapetona mujer madura, mi hermano bromeó conmigo, diciendo que él esperaba a una ancianita encorvada...

El tiempo suele moderar su agresividad con las maestras, o por lo menos, así lo parece... ¿O será que habitan un ámbito separado del universo, adyacente a la realidad cotidiana, pero al mismo tiempo separado de ella por paredes invisibles, pero poderosas, barreras paradójicas que protegen a sus habitantes del transcurrir incesante de las horas? (¿le suena familiar el lenguaje --guiñándole ambos ojos, alternativamente--?). Un abrazo.

 
At 11:52 a.m., Anonymous Anónimo said...

el cuero cabezudo said...

Se me adelantó por tres minutos...

¿Sacerdotarse? ¿Por que mejor no empadrarse? Ordenarse. L.-Anita; si sabías, pero te se olvidó...

 
At 12:04 p.m., Blogger Livi Jazmín said...

Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.

 
At 12:10 p.m., Blogger Livi Jazmín said...

Cuero Cabezudo: deje de corregirme. Tengo unas bufandas y no dudaré usarlas en su contra.

 
At 12:11 p.m., Anonymous Anónimo said...

el cuero cabezudo said...

Jajajajaja ¡Ande, pégueme! No se arrepienta...

 
At 12:20 p.m., Anonymous Anónimo said...

mi mama tambien es educadora, pero eso de llenar la casa de regalitos echos con trapeadores se le da mas a mi tia, que no es mas que ama de casa....
hay de todo en esta vida y tal vez tu madre sea tan unica como la mia.... (sus amigas le regalan ositos-cuchara en navidad?)

 

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